Cambio de la Correa de Distribución
El cambio de la correa de distribución es un procedimiento inevadible cuando hablamos del mantenimiento preventivo de nuestros vehículos. Esta correa sufre desgaste y deterioro con el uso, lo que eventualmente ocasionará que falle.
El elemento principal de la distribución es la correa y, en muchos casos, constituye la pieza más barata. Pero junta a la correa, se deben cambiar los rodillos y tensores, ya que con el uso, estos se van deteriorando y pueden también llegar a fallar. Si la correa o cualquiera de los elementos de la distribución llegaran a fallar, se saldrá de su posición la correa, lo que resultará en un daño importante del motor, principalmente de las válvulas. La reparación de un daño como este es costosa, y es por ello que no debemos ahorrar en costos a la hora de renovar la distribución de nuestro vehículo.
Existen más piezas, como la bomba de agua y la correa auxiliar, que también es recomendable sustituir a la hora de renovar la distribución. Estos dos elementos suelen ser bastante económicos, y en cambio las horas de trabajo que se requieren para cambiarlos suelen ser altas. Al desarmar la distribución del motor, estos elementos quedan a la vista, y por lo tanto su sustitución será económica. Sin embargo, esta es sólo una recomendación, y si el mecánico lo cree prudente, puede dejarlos sin cambiar.
Por lo tanto, a la hora cambiar la correa de distribución, es importante sustituir los otros elementos que intervienen en su funcionamiento. De esta forma reduciremos la probabilidad de sufrir problemas en un futuro a causa de una parte desgastada, que decidimos no cambiar por ahorrar un poco de dinero.
